Cuando me preparaba para escribir mi artículo semanal que había decidido dedicar al análisis de la situación en Ucrania, me llegó un correo de mi apreciado amigo, Juan Pablo Cárdenas, periodista chileno de dilatada trayectoria profesional, cuyas opiniones son siempre altamente consideradas por mí, a fin de mejorar el trabajo.
Juan Pablo me recordaba un artículo que escribí el 2 de septiembre de 2014 denominado “Europa, jugando con fuego en Ucrania”, que fue publicado por las Ediciones de la Radio de la Universidad de Chile que en ese momento él dirigía en un libro titulado “Mundo de locos donde he nacido. Un sistema internacional en permanente transformación”. En el mensaje, Juan Pablo rescataba el carácter “profético y acertado” de dicho análisis. Le consulté si creía que debía publicarlo nuevamente y su respuesta fue contundente: “Me parecería muy bien”.
Con el mayor respeto hacia el lector, siete años y medio después, vuelvo a entregar estas líneas. Increíblemente –y tal como lo percibió Juan Pablo- el análisis tiene plena vigencia, solo habría que cambiar algunos nombres y hechos que en ese momento eran recientes. Pero lo dejó sin cambios para que el lector valore los acontecimientos actuales y pueda percibir que los mismos responden a una política calculada y continuada de Estados Unidos que en el período ha tenido gobiernos demócratas y republicanos.
Europa, jugando con fuego en Ucrania
No sé si alguien se habrá dado cuenta, pero en mi opinión, el conflicto de Ucrania es el más peligroso de cuantos se hayan desarrollado en el planeta desde el fin de la guerra fría. Es verdad que en el período se han vivido varias invasiones a países africanos, golpes de Estado en América Latina, una profunda crisis económica y financiera, la sangrienta desintegración de Yugoslavia, el genocidio en el marco de un asedio permanente de Israel contra el pueblo palestino, la amenaza constante de ataque de la OTAN a Irán y las guerras posteriores a las intervenciones imperiales en Afganistán, Irak, Libia y Siria, pero en ninguna de ellas ha estado o está tan cerca el enfrentamiento directo entre dos o más potencias nucleares. Ello tiene explicación en el contexto local, regional y global. Vayamos de lo particular a lo general.
Para nadie es un secreto que en Ucrania hubo un golpe de Estado. El mismo tiene su origen, precisamente en la necesidad de la OTAN de crear una situación de conflicto como la que hoy existe. El gobierno del derrocado presidente Yanukovich era un obstáculo para ello. En ese sentido, el actual gobierno ucraniano no ha sido más que una creación de Estados Unidos y Europa.